En sintesis, el viaje de la banda estuvo plegado de alegrías, buenas vibras y rica comida en la tierra de nuestro hermano país el Perú. Las presentaciones tanto en lo musical como en lo humano salieron muy bien y lo mejor del viaje sin dudas fue que abrimos nuevas puertas a posibilidades de crecer como musicos y personas.
Conocimos ritmos maravillosos como el landó, la zamacueca, el vals y sobre todo el festejo, para lo cual traemos instrumentos que adornarán más aún el sonido de Rako en el futuro. Estuvimos con músicos de esos de verdad, que con dos acordes te abren la mente a un mundo nuevo de notas y sentidos del sonido. No podemos dejar de agradecer a Sergio Valdeos, Victoria Villalobos, Omar y Don Osvaldo que en su casa "la capilla" nos permitió estar en presencia de los dioses del vals peruano.
Conocimos ritmos maravillosos como el landó, la zamacueca, el vals y sobre todo el festejo, para lo cual traemos instrumentos que adornarán más aún el sonido de Rako en el futuro. Estuvimos con músicos de esos de verdad, que con dos acordes te abren la mente a un mundo nuevo de notas y sentidos del sonido. No podemos dejar de agradecer a Sergio Valdeos, Victoria Villalobos, Omar y Don Osvaldo que en su casa "la capilla" nos permitió estar en presencia de los dioses del vals peruano.
La Universidad Ricardo Palma, entidad que nos invitó, se pasó. Nos alojaron en un hotel de primera, nos atendieron como celebridades y sobre todo se encargaron de hacer un festival bueno bueno bueno, donde la gente pudo cada dia ver un show de primer nivel, y por que no decirlo, incluyendo a Rako. Gracias a Giancarlo Klauer y al Dr. Pntigoso por su hospitalidad y su trabajo en pos del festival. Grandes tipos.
En cuanto a la gente de la embajada, tanto el agegado cultural Cristian Beltrán como el Cónsul Fernando Zalaquet se pasaron de buenos con nosotros, asistiendonos con implementación para nuestra puesta escénica en el show de la Universidad Ricardo Palma. Fue muy lindo sentir que de verdad se puede contar con el gobierno estando lejos de la patria. Además de ser muy buenos en sus puestos, estos dos diplomáticos fueron muy buenos amigos en el Perú. Les debemos una salida a tomar un vino.
En cuanto a la fiesta... uufff... fue tan buena la noche peruana que casi nos quita la posibilidad de ver la luz solar.
Gracias a todos quienes nos escribieron a los emails, fotolog, etc para hacernos sentir su apoyo... ya pronto estaremos tocando y compartiendo con ustedes mas de nuestro viaje! Hay Rako para rato!!!